Por Cédula Real de Felipe II dispone que todos los obreros trabajaran 8
horas cada día, cuatro en la mañana y cuatro en la tarde.
Esta revolucionaria providencia de la corona introdujo a lo menos en su legislación, una reivindicación (8 horas) que no alcanzó el proletariado moderno en forma estable sino después de la Primera Guerra Mundial de 1914, tras un lapso de luchas ardorosas y a veces sangrientas.
Esta revolucionaria providencia de la corona introdujo a lo menos en su legislación, una reivindicación (8 horas) que no alcanzó el proletariado moderno en forma estable sino después de la Primera Guerra Mundial de 1914, tras un lapso de luchas ardorosas y a veces sangrientas.
En la Nueva Hispanidad abogamos por un trabajo digno y abogamos por una jordana laboral de 8 horas y un sueldo digno para poder cubrir las necesidades, el ocio... del trabajador y de su familia.
Es importante trabajar pero también es importante compartir tiempo con la familia, con los amigos, leer, descansar...
¡Por unos trabajos dignos!
¡Siempre sociales, siempre tradicionales, SIEMPRE HISPÁNICOS!
Al final es la misma constante en la universalidad de lo español, fuimos pioneros en todo y nunca nos será reconocido porque la falacia sobre lo español en la Leyenda Negra tendrá siempre más peso específico que nuestra realidad cómo uno de los mejores paises del mundo.
ResponderEliminarUn saludazo.